Esta realidad es un estímulo fundamental para adentrarse en el mundo de los negocios y especialmente en las inversiones de riesgo, pero ante todo comenzaremos por comparar las grandes coincidencias entre inversiones y emprendimientos. En ambos casos se comparten entusiasmo y fuertes expectativas desde el comienzo, pero también el hecho de que al cabo de un año la inmensa mayoría abandona el proyecto en la etapa inicial donde una actitud de sentar raíces sólidas y de continuidad en el cuidado de los detalles son fundamentales para alcanzar una estabilidad sostenida sobre la cual crecer y afirmarse.
Tanto emprendedores con grandes ideas que se convirtieron en start-ups o empresas incipientes, como inversores con todo el entusiasmo inicial por su primera experiencia en grandes mercados, se despiden resignadamente de sus sueños porque la gestión práctica y emocional para abordar los primeros problemas no era tan sólida como las expectativas.
La inevitable falta de experiencia sumada a la actitud de improvisar,
el seguimiento del negocio con actitud emocional, la mala gestión de los riesgos, una dedicación insuficiente y desorganizada, y el bloquearse ante la necesidad de incorporar conceptos técnicos de un universo nuevo, constituyen el detalle de esos errores tan comunes a la hora de perseverar en la permanencia y en un logro de beneficios consolidado.
Para el mundo de la inversión en los grandes mercados financieros hay una solución que reúne el conjunto de las respuestas técnicas y de tranquilidad y confianza que necesitamos, y donde nuestro seguimiento del negocio se simplifica a consultar resultados con un amplio porcentaje de éxito demostrado y a tomar decisiones relativas a qué hacer con nuestros beneficios y qué parte de ellos decidimos volcar como reinversión una vez recuperada la inversión inicial.
Conocer, observar y confiar sólo en algunos de los pilares fundamentales de TURBO y sus sistemas automatizados de alto rendimiento como la legalidad, la transparencia y la experiencia en el mayor mercado de inversión mundial, lleva a liberarnos de aquel conjunto inevitable de dificultades para quien confiaba en poder
asumirlas y resolverlas con pocas posibilidades de éxito, desde el desconocimiento y la actitud inocente de un jugador.
Si están resueltos una planificación coherente con la realidad del mercado e inteligente para administrar distintas cantidades de inversión, el conocimiento de la gestión de riesgos sin inestabilidad emocional e incertidumbres, y todo el tiempo necesario que requiere el cuidado del negocio, llegó el momento de aprovechar este tipo de soluciones integrales e innovadoras.
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